Me encantas las velas. Sobretodo las perfumadas, las que huelen. Muchas veces estoy con el ordenador y al lado una velita encendida, llenando el cuartico (literalmente es eso, menos de 2x2) del ordenador con su olor. Por otra parte, siempre tenemos velas con un mechero cerca por si se va la luz, como en cualquier casa.
Pero ¿sabíais que una vela sirve para más cosas? Como, por ejemplo, para hacer un magnífico regalo.
Happy Velas es precisamente eso, una manera muy original para regalar una joya. ¿Por qué regalar una joya en un estuche cuando puede ir metida en una vela que además perfuma el ambiente? Simplemente abres la vela, la enciendes y... a esperar a que puedas rescatar la joya del interior. Y mientras, a perfumar. Puedes elegir fragancia entre limón, frambuesa, lilas y más pero... no podrás elegir la joya. ¿Por qué? Pues porque es una sorpresa.
Puede salir un anillo o unos pendientes con un valor entre los 10€ y los... 500€. 500 eurazos, sí. Eso sí es una sorpresa ¿verdad?
Las velas están hechas de cera de soja, que tienen beneficios ecológicos y tal, pero os aviso una cosa: no es extrañéis por el tacto al desenvolver la joya. Y no os asustéis porque pringue, un poquito de agua y jabón y se te quedan las manos limpias limpias, aunque en un principio parezca que esa pasta nunca se va a ir de nuestra piel. La joya saldrá limpia porque está muy bien envuelta, pero si saliera con un poco de cera, se sumerge en un vaso con un poco de agua hirviendo y se agita y si no sale, un cepillo de dientes con un poco de detergente suave y ya está.
En nuestra vela ha salido un bonito anillo de algo que creo que es ámbar, pero es que yo para identificar estas cosas pues... ¿A qué esperáis para encargar una para regalarla y a ver qué sale?
Podéis hacer los encargos y obtener más información en su web www.happyvelas.com y ver más imágenes en su Facebook http://www.facebook.com/joyavela.
